Este año tuve un momento de motivación enorme pensando que había mejorado mucho, incluso que mis limitaciones eran anecdóticas y que a lo mejor me podía incluso plantear volver a un ritmo y a un trabajo más parecido al de antes del DCA.
Esta emoción se debió a que el mes de mayo para mí fue un mes muy activo en el que me volvía a sentir más cerca de la profesional que era, y en el que se juntaron varias actividades que me entusiasmaron. Era la primera vez que volvía a un congreso después de 13 años. Sentía que podía seguir en parte, a diferencia de hace años, las ponencias del congreso, que mi mente funcionaba de forma más rápida y se me ocurrían preguntas al hilo de lo escuchado, y se las pude a hacer a algunos ponentes, incluso en inglés, en ratos tranquilos. Después le siguió una presentación del libro en Pamplona, una presentación en el Colegio de Psicólogos de Madrid, y una ponencia en las Jornadas de Enfermería Neurológica.
En un primer momento solo observaba los hechos. ¡Había conseguido realizar esas actividades que me habían agotado un poco pero había podido resolverlas con éxito! Y eso para mí significaba casi que era la de antes. Una vez más la falta de conciencia de los déficits…
No se me ocurrió pensar también que ese mes había estado más descansada, ya que mi hijo pequeño había estado fuera, (el mayor es más independiente y le gusta cocinar) y no había tenido que ejercer tanto de madre ni llevar la organización de la casa como en otros momentos. No me di cuenta tampoco que aunque pareciera que las actividades se habían dado bien de forma espontánea las había preparado desde hacía tiempo para que salieran lo mejor posible. Las había programado cada una en una semana diferente con un largo espacio entre ellas y había cuidado varios detalles para que no se diera en mi mente una saturación de recursos.
No me acordé de que para las actividades que eran fuera había buscado unos sitios para dormir específicos tranquilos, no me había ido a casa de los amigos, para asegurar mi máxima descanso y poder afrontar estas actividades intensas en el mejor de los estados.
El mes siguiente, junio, fue un mes muy estresante para mí. Ya estábamos todos en casa, además de un invitado extranjero, y continuaba con mis actividades de los grupos. Además creo que también en este mes salió todo el cansancio del mes anterior. Y estaba enfadada conmigo misma y me lanzaba mensajes como de: “Pero si tú ya puedes hacerlo. Lo has demostrado en el mes de mayo“. En este mes fui realmente consciente de las limitaciones. Incluso me daba cuenta de que no podía hablar inglés con el invitado que teníamos en casa. Esta vez, sin embargo, me había metido en demasiados frentes y no me había preparado para ello, lo que lo convertía en un mes en el que sentía que no podía llevar a cabo las actividades mínimas.
Sin embargo ahora viéndolo con distancia me he dado cuenta de que sí, en general he mejorado a lo largo de estos 13 años y mucho, sobre todo en atención. Y contrastándolo con profesionales soy ahora consciente de que el éxito de las actividades del mes de mayo no solo se debía a una mejoría general sino a la interiorización de las herramientas aprendidas. A lo largo de los años he ido incorporando herramientas que para mí ahora son vitales y no era ni siquiera consciente de ello. Las he interiorizado.
El haberme hecho consciente de esto ha hecho que ahora en vez de estar enfadada, como me ha pasado durante el mes de junio por sentir que en realidad no había mejorado tanto, enfoque mi energía en aprender nuevas herramientas, sabiendo que repitiéndolas mucho con el tiempo acabo interiorizándolas y pasarán a ser parte de mi nueva identidad.
10 comentarios en «¿Mejoramos o interiorizamos herramientas? La recuperación post DCA»
Yo si hago deporte ando mucho y voy a natación libre pero mi problema es la soledad y que como consecuencia de mi daño cerebral tengo prospagnosia por lo que no puedo reconocer a las personas aunque sean conocidas y muy allegadas, así que aunque halla gente no puedo relacionarme mucho o nada. Ahora me he hecho voluntaria de la cruz roja ya he ido a varias reuniones y actividades pero lo paso mal porque van grupos grande de personas mayores y no puedo reconocerlas. Hoy hablando con la que lleva la organización de las actividades para mayores se lo he dicho que no podía colaborar por mi problema de reconocer a personas pero ella como es psicóloga me ha entendido y me ha propuesta actividades como voluntaria pero individuales que la cruz roja necesita a personas que la hagan, así que mañana empezaré con ella a aprender cómo hacerlas y espero no ponerme muy nerviosa y ser capaz de seguir siendo voluntaria y así lograr tener más actividades diarias.
Lola
Rosi, no te preocupes, lo mio viene de 5 años y voy aprendiendo, habra momentos en que vuelves atras, pero no te preocupes, sienpre mejoras, aunque no te des cuenta,
Lola, yo te dire que trabajar no es importante, lo importante es tener cosas que hacer en la vida. yo intento hacer deporte, me gustan muchas actividades deportivas, aunque no puedo hacer todas las que me gustan. Te dire que siempre hay cosas que se pueden hacer, y si no te gusta el deporte, puedes hacer otras cosas, yo por ejemplo me meti en cursos del ayuntamiento, me cuestan, pero merece la penas, y pueden ser muy vatiasdos, mira, yo hago cuatro, Cocina, Jardinerias, Ajedrez y Tai Chi, como ves muy variado, cada una te vale para una cosa, asi que no desesperes ytu marido seguro que te puede ayudar a hacerlas,
Y a todos lo demas, seguir viviendo, es algo importante.
Yo no trabajo ya porque por mi daño cerebral me jubilaron cosa que no veo justa porque yo me siento muy capaz de trabajar aunque no pueda asumir mi anterior puesto de responsabilidad. Yo como herramientas para seguir el día y cada mañana tener motivos para seguir activa me apunto que voy a hacer cuando me levante en mis famosa notas. Intento andar voy a nadar a natación libre. Y ahora me he hecho voluntaria de la cruz roja aunque todavía no me han adjudicado actividades .
Yo soy una persona muy activa y no concibo dedicarme exclusivamente a estar en mi casa con las labores domésticas y sin hablar con nadie en largas horas del día. Esperando que mi marido vuelva del trabajo para coner o dormir. Los momentos de mal carácter los tengo menos a menudo pero se me escapan. Que herramientas usais para seguir adelante con el daño cerebral invisible.
Saludos
Muchas felicidades. Y a seguir aportando tanto a usuarios con DCA y a profesionales que estamos en ese acompañamiento para generar mejores oportunidades de mejora cotidiana para seguir adelante de la mejor forma.
Espero llegar a conseguir esas herramientas estoy trabajando con ello me esfuerzo muchisimo y es muy doloroso admitir mis limitaciones pero me alegra y da fuerzas ver q muchos lo conseguis xq eso quiere decir q llegara mi momento
Una vez más, Aurora, me has emocionado. Me ayudas a comprenderme y a ser más indulgente conmigo misma. O, al menos a intentarlo. Esto me hace, también, sentirme con el derecho de explicarme para ser comprendida. Si me siento culpable, este derecho, por supuesto, no existe. No hay nada que explicar. En mi experiencia, que los demás nos entiendan es mucho más fácil de lo que podría parecer. Pero difícilmente van a poder hacerlo si no les contamos lo que nos pasa. Este primavera he estado muy enfadada conmigo misma por esto que explicas. Y el enfado ha ido en aumento en el verano. Hasta el punto de pegar algún «reventón» físico. Me das mucho que pensar. Gracias infinitas.
Que bueno lo que expresas Aurora, que bien Santiago. Llevo afectada 2 años y medio, aprendo de vuestros comentarios, me decís más de mí que yo misma. Esos bajones, esos entusiasmos porque a veces funcionó a pesar de las dificultades e inseguridad de poder hacerlo, esos enfados porque no salen las cosas, por tantos fallos, porque no llego… gracias por hacerme entender, aprender y abrirme camino. Gracias por la esperanza.
Gracias Aurora por lo bien que expresas el problema, ayudas a mucha gente. Gracias Lurdes por tu valentía y tus ganas de vivir
Hola a todo el que lo lea y a Aurora en particular, decir que lo mio no es de tantos años, pero teneis razon, voy metiendo herramientas segun pasa el tempo, todavia tengo muchos problemas, pero lo importante es ir mejorando,
Una vez mas voy en paralelismo contigo. He cumplido 13 años en agosto y como es habitual en los veranos de los últimos años, no he estado bien: pasivo, inapetente. indiferente, de manera que me reafirmaba que no había mejorado. Pero no es así. Ahora a la vuelta de vacaciones he planificado mi vida otra vez, esto es he programado mi agenda, marcando mis actividades, según preferencias, importancia, urgencia, tiempo disponible, las rutinarias, las ordinarias, las extraordinarias, las sociales, las de ocio, las de aficiones… y las he marcado en la agenda para las primeras semanas, y dejando tiempos muertos para las que surjan. Cada semana, hago valoración de resultados y planteo la siguiente. Estoy animado y mejor, puedo hacer cosas bien y muy bien, cuando las hago sin prisa y con atención. Tras hablar con mi neuropsicólogo, me ha confirmado que estoy mejor y hemos fijado las sesiones con más tiempo intermedio, cada dos semanas en vez de semanalmente. Me ha ayudado a ser mas consciente de mi mejoría. Quiero animaros, la mejoría es muy muy lenta. pero es. Tenemos que asumir las secuelas, manejarlas, conocer y aplicar herramientas y seguir seguir y seguir.